domingo, 3 de abril de 2011

Santiago de Compostela - Melide

Empezamos fatal el 2011, una lesión que me tiene en vilo durante casi dos meses sin bici ni senderismo ni prácticamente ningún ejercicio físico, cosa a lo que no estoy acostumbrado, finalmente tras un montón de pruebas medicas me dan vía libre para seguir haciendo  lo que me gusta poco a poco y sin pasarme.

Que si no hubiera estado mal no habríamos hecho esta salida es casi seguro, todo vino a raíz de que le dijera a Nuria que cuando estuviera bien haríamos una escapadita pero lo que sí que puedo garantizar es que si no hubiera existido Facebook hubiera sido impensable ir a Galicia.

Un día trasteando en Facebook me da por poner el nombre de mi muy mejor amiga (como diría Forrest Gump) que marchó a vivir a Galicia cuando éramos todavía unos mocos y de la cual no sabía nada desde hace 22 años, ahí es nada, contacto con ella y le hace tanta ilusión como a mí,  mensaje para arriba y para abajo hasta que se me ocurre mirar el coste de un vuelo a Santiago de  de Compostela, joder!!! por menos de 80€ vamos y venimos los dos. Se lo planteo a Nuria, porque no vamos a Santiago de escapadita, nos comemos unas mariscadas y vamos a ver a unos amigos que tengo allí???
Le parece buena idea y en tres semanas estamos en el aeropuerto del Prat.

Llevamos 15 o 20 minutos de vuelo y tras ver un relámpago por la ventana dicen por megafonía que volvemos a Barcelona ya que un rayo ha tocado el avión y hemos de cambiar de aparato. La primera en la frente, pensábamos que ya teníamos el día echado pero nada más llegar al aeropuerto hay un avión preparado, en menos de media hora estamos de nuevo en el aire.
Finalmente aterrizamos a las 12 más o menos, solo hemos perdido dos horas y pico, el tema se endereza. Vamos a por el coche de alquiler y no quedan Citroën C2 por lo que nos dan un C3 por el mismo precio, bien!

Tiramos hacia la península de O Grove donde hay que comerse una mariscadita por obligación, antes pasamos por la isla de la Toxa, no me veas con las casas de la zona, está todo muy chulo pero vamos al lio que son las 14 horas y hay un hambre que no veas. Damos una vuelta por el paseo y en la primera marisquería con buen aspecto entramos.

Una mariscada para dos y un plato de pulpo para ir haciendo tiempo. Cigalas, mejillones, nécora, gambas, langostinos y vieiras, todo delicioso, comemos estupendamente.

Salimos del restaurante, damos una vuelta por la playa de a Lanzada, Sanxenxo y vamos hacia Santiago, tenemos casi 1 hora y aunque me hubiera gustado pasar por Fisterra decidimos no hacerlo ya que hay que dar mucha vuelta y nos retrasaríamos demasiado.




Llegamos a Santiago y vamos al hotel Miradoiro Belvis, reservado a través del Booking, con una situación fantástica justo detrás del mercado de Abastos. El hotel perfecto, muy limpito y todo bastante nuevo, buen precio y  encima con unas vistas desde la habitación preciosas.

Nos vamos a dar una vuelta por Santiago y aunque ha llovido parece que no irá a mas, cagada, cuando llegamos a la plaza Cervantes cae un buen chaparrón que es historia en 10 minutos, podemos seguir paseando.
Sin conocer demasiada historia de la ciudad vamos completamente a nuestro aire, parándonos donde nos apetece y haciendo fotos sin parar, la llegada a la catedral es demasiado, todo el casco antiguo lo es pero la catedral impacta bastante. Unos cuantos escaparates no podían faltar y tras esto nos vamos a cenar, paramos en un mesón bastante guapo donde nos comemos unos embutidos con quesos típicos y un buen plato de lacón, la tarta de chocolate es el punto final.
Tras salir del mesón son casi las 12 y pasear por la zona en domingo a esas horas es una mezcla de intranquilidad y paz, no hay prácticamente nadie en la calle salvo una pareja de yonkis inofensivos intentando coger monedas de una de las fuentes con un paraguas, menudos personajes.


El paseo me ha sentado de fabula para bajar la comida y cuando llegamos al hotel caemos derrotados en la cama.
La mañana siguiente la dedicamos a recorrer a fondo el casco antiguo, el mercado funcionando aunque con muy pocas paradas abiertas ya que al ser lunes no hay casi mercancía, vamos a la catedral a ver si vemos el botafumeiro en marcha pero no hay suerte a pesar de chuparnos toda la misa. Más tarde damos con una calle donde están todos los restaurantes y tascas, aprovechamos para comer empanada y un vinito Albariño, que rico, ya casi es la hora de comer y tras hacer unas compras nos vamos a una marisquería donde nos hincamos una mariscada con bogavante y percebes, aparte de todo lo demás, buf, creo que sería capaz de quedarme aquí un mes.



Tras el manjar nos acercamos al hotel y a las cuatro salimos para Melide a ver a Sonia y familia, estoy un pelín nervioso, es mucho tiempo.
Llegamos. Está Sonia en el cruce donde quedamos esperándonos, cuanto tiempo, abrazos, besos y presentación a Nuria antes de entrar en casa de sus padres donde esta esperándonos su madre con una sonrisa enorme, que alegría verlos de nuevo tras tantos años.
Tras echar un ratito hablando y recordando cosas de cuando éramos pequeños nos vamos con Sonia que nos tenía preparada una ruta por los sitios más emblemáticos de los alrededores, no sin antes pasar por su bar, presentarnos a Alex y hacer una visita a su hermano.
Subimos al coche , vamos hablando y riendo todo el rato mientras sigo sus indicaciones hasta llegar a la Capela, una pequeña capilla con su cementerio en un paraje precioso con un rio chulísimo. Como me lo pasaria yo aqui con la bici.
Para empezar promete la cosa!


De aquí pasamos a las Fervenzas de Brañas, una cascada impresionante con una casita al lado, otro sitio para no perderse.

La laguna de Sobrado es la siguiente parada antes de llegar al monasterio dos monxes, un tremendo monasterio que está prácticamente vacío salvo una maqueta enorme de la catedral de Santiago, el monasterio merece la pena es muy bonito y grande. Tras la primera parte del “tour express” nos paramos a tomar algo, hay mucho feeling con Sonia por las tres partes, recuerdos de cuando íbamos a parvulario se van intercalando con situaciones actuales, que pasada.


La siguiente parada fue la que más me gustó, Furelos, un pueblecito con un puente medieval del siglo XII precioso donde tomamos unos vinos en una tasquita de no más de 20 metros cuadrados donde el propietario que es ebanista y conocido de Sonia nos da conversación durante un ratito.

De aquí nos vamos a O Coto cooperativa milhulloa, perteneciente a palas de rei (Lugo), en esta cooperativa está Mª Carmen, la hermana de Sonia donde trabajan cultivando especies de plantas medicinales, momento muy emotivo también, tras hablar un ratillo quedamos para más tarde y nos dirigimos a nuestra última visita del tour, el castillo de Pambre Palas de rei, solitario en medio del monte en otro paraje tremendo.

Tras estas visitas nos vamos de nuevo a Melide y despues de pasar por O sapo Lambón (el bar de Sonia) y recoger a MªCarmen y Carlos nos vamos a tomar unos vinos, bueno,  unas Coca-Colas en mi caso, que me quedan 50km. de regreso a Santiago por una zona que no conozco y encima de noche, lo pasamos genial visitando unas tasquitas hasta que finalmente nos sentamos a cenar un poco y hablar durante un buen rato, aquí sí que pruebo la Estrella Galicia que ya tenía ganas mientras Mª Carmen no se que cuenta de unas cerillas, jajajaja.
Son casi las 12 de la noche y tenemos que regresar ya que mañana hay que levantarse pronto para ir al aeropuerto.
Vamos a casa de los padres de Sonia a despedirnos, recibo una foto mía de cuando era pequeño que no tiene desperdicio y pienso guardar como si fuera oro,aunque no pienso colgarla aqui, jejeje, la despedida hace que marche con un nudo en la garganta, odio estos momentos pero que se le va hacer, el regreso es un monólogo de todo lo que hemos hecho durante la tarde.
Han sido dos días muy intensos, lo hemos pasado genial y toca volver al día siguiente. Estoy casi sin pegar ojo en toda la noche, nos vamos hacia el aeropuerto.
Súper agradecido de la hospitalidad recibida de una familia que considero propia.
Esperamos volver pronto y  poder estar más tiempo disfrutando juntos.